El rendimiento profesional está muy vinculado con la concentración. En esta época del año, muchas personas todavía sienten que no están al cien por cien de sus posibilidades después del parón estival. ¿Cómo mejorar la concentración en el trabajo?
1. Aprende a mantenerte enfocado en el asunto que te ocupa en ese momento, viendo en este método de trabajo el mejor premio que puedes obtener ya que cuanto antes finalizas una tarea, más posibilidades de integrar descansos y menor sensación de estrés ante los trámites pendientes de cumplir. Por el contrario, la dispersión produce la sensación de pérdida de tiempo al ver cómo pasan los minutos sin observar frutos positivos al trabajo. Identifica cuáles son tus distracciones habituales durante la jornada laboral, qué ladrones de tiempo enfrentas de lunes a viernes para tenerlos bajo control.
2. Conviene evitar el exceso de autoconfianza en el trabajo en el sentido de no considerar que somos más fuertes que todas las distracciones posibles. Por ejemplo, si sabes por experiencia que tiendes a consultar el móvil de una forma recurrente en horario laboral, lo más práctico puede ser tenerlo apagado durante la jornada y encenderlo solo en momentos puntuales.
3. Conviene llegar cada día al trabajo cinco minutos antes del horario de inicio de la jornada para tener este margen de tiempo para ordenar el escritorio y organizar el espacio de trabajo ya que este es uno de los factores clave par mejorar la concentración y el rendimiento. Cuando te sientes bien en tu zona de trabajo, también estás más cómodo.
4. Muchas personas pasan mucho tiempo sentadas durante su jornada laboral, por esta razón, el deporte y el ejercicio físico son hábitos esenciales para activar la mente. El deporte también es positivo para prevenir el insomnio. Y un descanso de calidad es uno de los ingredientes básicos para incrementar la concentración.
5. Realiza el ejercicio de anotar en la agenda los tiempos reales que tardas de modo habitual para realizar las gestiones cotidianas de tu jornada laboral. Este tiempo real es clave para organizar tus días sabiendo que si el día tiene veinticuatro horas, no puedes llegar a todo. Algunas personas se frustran porque calculan mal sus ritmos, se marcan más propósitos de los que pueden abarcar en un solo dia.
