La llegada de las vacaciones de verano crea unas condiciones externas de descanso y relax que son muy propicias para integrar el hábito del pensamiento positivo como un estilo de vida. ¿Cómo potenciar el pensamiento positivo durante el descanso?
1. En primer lugar, relativiza el valor objetivo del tiempo. La verdadera intensidad en las vivencias surge del corazón: cuando vives una situación con intensidad y serenidad alimentas tu mente con vitaminas de amor y esperanza. En ocasiones, nos dejamos arrastrar por la prisa. Pero es muy importante hacer un elogio de la lentitud para no tener prisa por llegar a un punto determinado y disfrutar más de las vistas del bello paisaje del camino de la vida.
2. Puede que tus circunstancias presentes no sean tal y como te hubiese gustado, sin embargo, seguro que si te concentras en las razones de optimismo que hay en tu vida, descubres un montón de razones para sonreír a la vida como en un espejo. Tal vez, tus circunstancias no sean ideales, sin embargo, seguro que puedes hacer algo para modificarlas en cierta forma .Siempre puedes ejercer una influencia positiva sobre ti mismo a través de tu actitud.
3. La libertad es un ingrediente real en la vida de las personas, sin embargo, podemos ser nosotros mismos los que limitemos esta libertad a través de los prejuicios negativos, el miedo y el pesimismo. Como afirma un libro del psicólogo Bernabé Tierno: «Si puedes volar, por qué gatear». La libertad potencia el desarrollo personal, no te pongas límites a ti mismo y ámate con el corazón.
4. La verdadera belleza es aquella que nace en el interior: habla en positivo de ti mismo. Admírate de la maravilla de tu ser ya que eres una persona única e irrepetible. Disfruta de ti mismo y de tu propia compañía.
5. Es posible sentir desorientación al no saber cuál es el camino correcto. Sin embargo, es fundamental tener paciencia y recordar que después de una caída tienes fuerza para volver a levantarte. Si lo necesitas, pide ayuda. Seguro que encuentras una mano amiga dispuesta a acompañarte en parte del camino. También puedes realizar un proceso de coaching para incrementar tus recursos personales.
6. No importa la edad que tenga una persona, siempre tiene posibilidades de cambiar y dejar atrás ciertos hábitos para integrar otros más positivos. Cultiva la juventud de espíritu a través de la ilusión.