Uno de los objetivos más importantes en la aventura de la vida es disfrutar cada día como una fiesta. Disfrutar no es un medio sino un fin en sí mismo que suma felicidad. ¿Cuáles son las claves para disfrutar de la vida?
1. Encuentra espacios cada día en los que puedas disfrutar de actividades que te gustan y te entretienen. Existen personas que inician la semana poniendo su felicidad a la espera de que sea viernes para poder realizar ciertas actividades de ocio. Podemos dejar a la espera muchas cosas pero nunca deberíamos aparcar nuestra propia felicidad.
2. Evita los ladrones de energía que te roban la paz: el pensamiento negativo, las críticas, las quejas, la soberbia… Por el contrario, puedes alimentar el cariño hacia ti mismo y practicar el altruismo cotidiano para sentir el efecto terapéutico que produce la esperanza.
3. Invierte tiempo en ti mismo pero también en los demás. Las personas que se encierran en sí mismas no son felices de verdad.
4. Evita hacer generalizaciones de carácter absoluto puesto que las palabras siempre, todo, nunca o nada no describen el amplio abanico de matices que contiene la realidad. Cuando abusamos de estos términos, clasificamos las cosas en compartimentos estanco.
5. No pases ni un solo día sin sonreír. La sonrisa muestra la ley del espejo con la que miras el lado positivo de la vida.
6. Camina despacio y avanza a tu ritmo. La vida no es una carrera de obstáculos en la que estás obligado a llegar el primero a la meta. No te dejes condicionar por aquello que hacen los demás cuando puedes ser tú mismo.
7. No se trata de vivir pensando que cada día puede ser el último porque aunque es evidente que esto puede ocurrir, sería agotador a nivel emocional vivir con la sensación de estar en la cuerda floja. Sin embargo, sí es muy importante poner conciencia al presente, aprovechar las oportunidades y saber que la vida no es eterna. Saberlo a nivel de mente y corazón.
8. Lucha por alcanzar tus objetivos de trabajo y persevera hasta encontrar el empleo que mejor se ajuste a tus expectativas. Ten paciencia, el reto no es sencillo pero merece la pena.
9. Cuídate siempre, como si fueses tu mejor amigo. Ya que, de hecho, debes aspirar a serlo.
10. Esucha música con más frecuencia porque la vida es más bella al compás de una melodía.
