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Encuentra tesoros fuera de tu zona de confort

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Es evidente que en nuestra zona de confort tenemos muchos regalos, bienes que disfrutamos y que apreciamos. Sin embargo, si no avanzamos más allá de esta línea de seguridad corremos el riesgo de no descubrir algunos de los regalos que la vida tiene destinados para nosotros. Puedes echar la vista al pasado para descubrir cómo llegaron a tu vida algunas de las experiencias más enriquecedoras y observarás que en muchos casos, fue gracias a que te animaste a tomar una nueva iniciativa, que tuviste esta oportunidad de realizar un hallazgo importante para ti.

En ocasiones ocurre que, de acuerdo a la edad, las personas experimentan un gran apego a la zona de confort, valoran más la seguridad frente al riesgo y priorizan aquello que tienen como si por el hecho de arriesgarse, pudiesen llegar a perderlo. El otoño es la perfecta metáfora del cambio a través de la caída de las hojas de los árboles que dejan en la memoria la nostalgia de ese pasado primaveral marcado por la intensidad de los colores de las flores.

Las personas también podemos y debemos renovarnos a nivel emocional, dejar que caiga de nosotros aquello que sobra para hacer espacio a lo nuevo. Puedes realizar un itinerario para salir de tu zona de confort en tu vida profesional, en tu tiempo de ocio, en tus relaciones de amistad, en tu vida de pareja, en tu vida familiar o incluso, en tu relación contigo mismo. Cada persona tiene una historia y no todas las personas tienen una experiencia paralela en todos los ámbitos de su vida. Puede ocurrir que una persona sea aventurera en un ámbito mientras que siente vértigo ante el menor cambio en otra faceta de su vida.

No pierdas la capacidad de observar, investigar, buscar distintas opciones y explorar nuevos caminos porque si siempre realizas el mismo itinerario puede que corras el riesgo de aburrirte de tener siempre las mismas vistas del paisaje. Toma el descanso que te aporta tu zona de confort como descanso muy agradable para tomar impulso. No se trata de saltar al vacío constantemente sino de buscar el equilibrio desde la prudencia y el sentido común.